Lima las aristas,
Suprime lo divisible,
Empaña lo que brilla,
Confúndete con lo que es tan humilde como el polvo.
Esta es la verdadera igualdad,
Que no se puede conocer,
Ni se puede enajenar,
Ni ser beneficiada,
Ni ser dañada,
Ni ser exaltada,
Ni ser adulterada.
Luego es la cosa más valiosa del mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario